El agua no es mercancía, que no se privatice
TIJUANA.- Acorde a la campaña en contra de la privatización del agua, Pedro Castillo Chavoya advirtió que “la ofensiva de todavía está latente, pero podemos cambiar todo eso con el poder del voto; el domingo 7 de junio razonen bien el poder de su voto, no dejen de votar, ni voten por los mismos de siempre, hoy tienen una mejor opción, por el PT en el Distrito 4”.
Como Diputado Federal, indicó Pedro Castillo, no permitirá que conviertan el servicio de suministro y tratamiento del agua en una mercancía; “con el voto de ustedes, a favor de su servidor, elevaremos la voz del pueblo en la tribuna de la Cámara de Diputados para oponernos contra la privatización de dicho servicio; y si para entonces la actual legislatura lo haya decretado, la vamos a derogar”.
Sí se puede, señaló Pedro Castillo, diciendo que lo ideal sería que llegaran a tener mayoría los del Partido del Trabajo (PT) en la Cámara de Diputados; pero si así no sucediera, entonces él recurrirá a los mecanismos democráticos de los referéndums y plebiscitos, para echar abajo todas la reformas que tienen a privatizar los servicios públicos y la explotación de nuestras riquezas naturales.
Hasta el momento, solamente mexicanos pueden explotar el petróleo (hasta ahorita mediante Pemex), y los organismos paraestatales operadores del agua, por señalar unos casos, pero con las reformas están permitiendo que vengan empresas transnacionales a invertir y explotar esos recursos, con el pretexto de que “El Estado no tiene la capacidad suficiente para disponer de tecnología y recursos suficientes para brindar un servicio de calidad, y accesible para todos”.
Aducen que no hay capital mexicano suficiente, ni mano de obra mexicana suficiente, ni talentos mexicanos suficientes para que manejemos nuestros propios recursos. “Eso es falso”, aclara Pedro Castillo, “lo que pasa es que el Gobierno de Estados Unidos es quien les dicta las directrices, y además, los gobernantes y sus diputados cómplices solamente se interesan en los dólares que les prometen los extranjeros, en esas iniciativas entreguistas”.
Por otro lado, aún y cuando en el caso de la operación de servicios de agua y alcantarillado fueran empresas nacionales, se trata eso de un servicio público básico para la vida, no para ser tratado como una mercancía, pues si la privatizan, nos va a salir muy caro el servicio, aumentarán tarifas, no habrá decretos de eliminación de multas y recargos, ni consideraciones especiales a las personas de la tercera edad y con discapacidad, ni habrá subsidios oficiales, además de que van a limitar el consumo por persona, y hasta van a afectar a las comunidades rurales, las cuales no están consideradas entre las prioridades de la nueva Ley de Aguas Nacionales.
“Amigo lector, tú puedes impedirlo con tu voto este domingo 7 de junio; decide bien”, expresó Pedro Castillo Chavoya, que promete no va a fallarles a los del Distrito 4 como Diputado Federal.