* El nacimiento prematuro, es la principal causa de ingreso al
servicio de Neonatología
TIJUANA, B.C.- Miércoles 14 de enero 2015.- Gracias al trabajo
realizado por el equipo multidisciplinario del Hospital General de
Tijuana, este día se dio de alta al menor Bayron Alexander, quien
debió permanecer hospitalizado en el área de Neonatología durante 40
días, por nacer de forma prematura (a las 28 semanas de gestación).
En este sentido, el Jefe del Servicio de Pediatría del nosocomio,
Óscar Armenta Llanes, señaló que este caso representa un éxito más de
la Secretaría de Salud, en la administración que encabeza el
Gobernador, Francisco “Kiko” Vega de Lamadrid, y se logró debido a la
adecuada atención médica recibida.
Detalló que el recién nacido presentó la enfermedad de membrana
hialina, la cual se produce por el déficit de una sustancia al nivel
de los pulmones (surfactante pulmonar) por la misma prematurez del
nacimiento.
“Esto hace que los niños desarrollen problemas respiratorios muy
graves, y por ese motivo el menor requirió atención en la Unidad de
Cuidados Intensivos Neonatales”, mencionó el especialista.
Durante su hospitalización, el menor recibió atención permanente por
parte de médicos pediatras, neonatólogos, cirujanos, neurólogos,
cardiólogos, personal de enfermería, además de la valoración de la
oftalmóloga pediatra para descartar retinopatía del prematuro.
“Este es un caso exitoso del servicio de Pediatría, ya que gracias al
personal del Hospital General de Tijuana, en colaboración de sus
padres, el menor se encuentra en buen estado de salud, logrando un
peso de 1 kilo 810 gramos al momento de su egreso”, explicó Armenta
Llanes.
Por su parte, la madre del menor, Kassandra Guadalupe González Jocobi
de 21 años de edad, relató que el 6 de diciembre del 2014 acudió a la
unidad de labor del Hospital General de Tijuana al presentar trabajo
de parto, y por las condiciones del bebé debió ser intervenida vía
cesárea.
Informó que el nacimiento de su primogénito se registró ese mismo día
a las 14:02 horas, pesando tan sólo un kilo 225 gramos y midiendo 29
centímetros.
Ahora, tanto ella como su esposo, Juan Antonio Torres Ibarra, salieron
del nosocomio con su recién nacido en buen estado de salud.
Cabe mencionar que al contar con póliza vigente del Seguro Popular, a
través del fondo de gastos catastróficos, la atención médica del menor
fue gratuita en esta unidad hospitalaria.