IMSS RECOMIENDA ESTILOS DE VIDA SALUDABLE PARA PREVENIR ENFERMEDADES CORONARIAS INFARTOS:
Por José Luis CORTES
TIJUANA.-Tabaquismo, presión arterial elevada, diabetes mellitus y colesterol alto en la sangre, son considerados como los principales factores de riesgo para sufrir enfermedades relacionadas con el corazón o los vasos sanguíneos, en tanto que la cardiopatía isquémica se ubica entre las más frecuentes en este tipo de padecimientos.
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) explicó que la enfermedad coronaria es la principal causa de los infartos e indicó que otros factores de riesgo a considerar son la obesidad y el estrés.
Dijo que la mayoría de los riesgos antes señalados, pueden evitarse o controlarse con una buena dieta y realizando ejercicio de manera cotidiana, por lo que recomendó a la población adoptar estilos de vida saludables que les permitirá disfrutar de mejor calidad de vida.
Detalló que cuando las coronarias se obstruyen por el colesterol acumulado dentro de ellas, al músculo cardiaco le llega menos sangre y por lo tanto menos oxígeno, a eso se le identifica como isquemia y a la enfermedad que produce, se denomina angina de pecho. “Al obstruirse por completo la arteria, ocasiona la muerte o necrosis del músculo, lo que conocemos como un infarto”, precisó.
Resaltó que la angina de pecho se manifiesta con dolor; este es característico toda vez que se siente como una opresión intensa detrás del esternón; con frecuencia se corre hacia el brazo izquierdo, la mandíbula o el cuello. Los esfuerzos físicos o el estrés emocional lo pueden desencadenar. Es frecuente que se acompañe de sudoración fría, deseos de vomitar o defecar y sensación de muerte inminente.
El Instituto apuntó que generalmente el tratamiento de la enfermedad coronaria es igual para hombres y mujeres y consiste en recomendar cambios en el estilo de vida; medicamentos; procedimientos médicos y quirúrgicos, así como la rehabilitación cardíaca.
Recomendó para prevenir o tratar la enfermedad coronaria evitar tabaquismo, privilegiar una alimentación saludable, moderar o no consumir bebidas alcohólicas; practicar el ejercicio, mantener un peso saludable, y procurar estabilidad física y emocional para evitar el estrés, entre otras medidas. (JLC)