Ante las declaraciones realizadas por el Gobernador de Baja California, Jaime Bonilla, al referir que los regidores del Ayuntamiento de Tijuana son “lamebotas”, el regidor Luis Quezada Salas, afirma que el mandatario estatal debería “dejar las políticas sucias a un lado y mejor entregarle a los Tijuanenses los 600 millones de pesos que envió la federación a los tijuanenses”.
El regidor del XXIII Ayuntamiento indicó que el constante enfrentamiento que tiene el Gobernador con todos los sectores, es debido a su continúo malestar que únicamente le quedan 11 meses de gobierno y su legado será un estado “con conflictos constantes y sin progreso”.
Quezada Salas, reiteró que como ejemplo es quedarle mal a los maestros, al sector médico, a los ciudadanos sin agua y a los constantes abusos por parte de su Gobierno.
“Es increíble la obsesión que tiene el Gobernador con Tijuana, primero clausurar los servicios médicos municipales, después cerrar los almacenes de despensas del DIF, ahora retiene de manera ilegal recursos que envía la federación por más de 600 millones de pesos, si nos dice lamebotas, yo le digo que es un dictador sin escrúpulos” agregó.