TIJUANA, BC., a 16 de marzo de 2020.- El director de Protección Civil del Estado, José Salvador Cervantes Hernández, informó que a través del programa de la Escuela de Protección Civil (EPROC BC), servidores públicos y ciudadanos en general, se reúnen para ser capacitados en acciones de prevención y protección civil.
Explicó que por instrucción del gobernador Jaime Bonilla Valdez, se instaló el pasado 9 de enero la Escuela de Protección Civil, que tiene como finalidad ser una institución educativa, orientada a la formación y capacitación de técnicos, profesionales y especialistas en materia de protección civil y gestión integral del riesgo.
Por otro lado EPROC BC, está orientada también a la formación de la comunidad, a través de programas educativos, orientado a la prevención, mitigación de desastres, manejo de emergencias y gestión integral del riesgo.
El titular de Protección Civil detalló que en el Marco de Sendai para la Reducción del Riesgo de Desastres 2015-2030, adoptado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), se establece que toda persona o una sociedad en el mundo, debe tener conocimiento a lo que está expuesto en su entorno y así saber cómo reaccionar ante una contingencia o emergencia por algún fenómeno natural, llámese sismo, precipitación pluvial, riegos en las escuelas, el hogar y el trabajo.
Salvador Cervantes dijo que al llegar a esta administración, se han dado a la tarea de identificar las áreas de oportunidad para desarrollar este proyecto, validado por el gobernador Jaime Bonilla Valdez, y del secretario General de Gobierno, Amador Rodríguez Lozano, y afortunadamente las instalaciones de Protección Civil del Estado en Tijuana cuentan con los espacios suficientes, como aulas y salas de audiovisuales para la capacitación integral, tanto a servidores públicos, como al ciudadano.
Los cursos y talleres están enfocados en tres grandes vertientes, la primera es la capacitación enfocada a impartir cursos a los brigadistas de Protección Civil, de cómo organizar cuerpos de rescate y búsqueda, evacuación y primeros auxilios.
En segundo término, estos cursos y talleres son gratuitos, y están dirigidos a la población en general, por eventos que históricamente nos dejaron marcados en Baja California, como las lluvias devastadoras de 1978, 1993 y 1998, que provocaron inundaciones, deslaves y deslizamientos, así como el sismo de 7.2 grados que azotó la región el 4 de abril de 2010.
“La reacción oportuna ante fenómenos naturales, por las características climatológicas y topográficas del Estado que son muy diferentes al resto del país, es importante; que la población lo comprenda para estar preparados”, aseguró.
La tercera vertiente es el tema de la “vulnerabilidad”, donde entra esta capacitación, existen en la región numerosos asentamientos humanos que viven en cuencas, cerros, terrenos inestables o simplemente la deficiencia de cómo están construidas las viviendas, por consiguiente, están expuestos a muchos peligros o lo que llamamos “construcción social del riesgo”.
José Salvador Cervantes indicó que los bajacalifornianos nos situamos en una región, en donde existen varias fallas geológicas, que son totalmente impredecibles. “No se trata de esperar solo el impacto de un temblor, sino realizar acciones preventivas, como edificar construcciones con materiales de buena calidad, alejarse de zonas de alto riesgo y de cómo proteger a sus familias ante cualquier eventualidad”, agregó.
Los trabajos de Protección Civil del Estado están vinculadas con la Secretaría de Integración y Bienestar Social (SIBSO), para reunir a grupos de vecinos de las colonias marginadas, integrando vocales en las comunidades, que son el puente de comunicación entre sociedad y el gobierno, para detectar oportunamente hundimientos de tierra, agrietamiento en paredes de las viviendas, entre otras situaciones.
El funcionario detalló que la ciudad de Tijuana, particularmente, es de suelo arenoso y que todo fraccionamiento de reciente construcción debe respetar las normas de edificación en Baja California, y que no suceda como el caso de Lomas del Rubí y Sánchez Taboada, que generó el colapso de muchas viviendas, por la expansión y contracción de la tierra por las lluvias o movimientos telúricos.
De ahí la importancia, antes de construir hay que consultar los atlas municipales y estatales de riesgo, y también evitar a toda costa la autoconstrucción, ya que al no hacer un estudio de mecánica de suelo, verificar la factibilidad y la estabilidad del terreno, puede provocar que se derrumbe una casa.
Los programas internos de Protección Civil en las escuelas son constantemente monitoreados y se actualizan anualmente. La dependencia imparte 12 talleres al mes, y se puede consultar el calendario de actividades en el portal www.proteccioncivilbc.gob.mx. o acudir directamente a sus instalaciones la calle Pánfilo Natera 6400, en la colonia Francisco Villa de esta ciudad.
Dijo el Dr. Cervantes Hernández, que es indispensable apostarle a la prevención con la finalidad de estar preparados ante cualquier situación de urgencia que pudiera presentarse con capacitaciones en primeros auxilios y seguimiento de los programas de Protección Civil.
Un ejemplo de esto es cuando se suscitan incendios o deslizamientos de tierra, a los que tienen que acudir personal especializado para evaluar los daños y determinar si las viviendas son un peligro para sus ocupantes o a pesar del siniestro se mantienen aptas como vivienda.
En ese sentido, reconoció y agradeció a los participantes de las capacitaciones, que hasta la fecha se han instruido a 300 personas desde que inició este programa. Se espera muestren resultados palpables, y una mayor dispersión de la cultura de prevención, concluyó.