A pesar de contar con un permiso especial para reportar hasta el 11 de marzo, el cerrador dominicano llegó desde el primer día de entrenamiento a Tucson
TIJUANA, Baja California (TorosDeTijuana.com-Armando Esquivel) 4 de marzo del 2019 – Es fácil localizar a José Rafael Díaz durante las prácticas de pretemporada de Toros de Tijuana en el Kino Sports Complex de Tucson, Arizona.
El dominicano que acaba de cumplir 35 años resalta del grupo por su trabajo durante toda la práctica, por su risa y buen ánimo que atrae a sus compañeros y también por su imponente figura, razón por la que quizá se ha ganado el sobrenombre de “Jumbo”.
El cerrador que acaba de coronarse con Estrellas Orientales y que representó a República Dominicana en la Serie del Caribe, reportó antes de tiempo al campamento de Toros de Tijuana, ya que su fecha de arribo estaba programada para el lunes 11 de marzo, debido al permiso especial por su participación en la cita caribeña.
“Me dieron la opción de llegar más tarde, pero yo quise llegar temprano para que mi preparación física sea mejor y estar disponible para cuando los juegos empiecen; vengo de jugar la serie final y también la Serie del Caribe; no me gusta tomar mucho tiempo de pausa”, comentó al finalizar la práctica.
Díaz, quien jugó cuatro temporadas en Grandes Ligas con los equipos de Rojos de Cincinnati y Rays de Tampa Bay del 2014 al 2017, se puso desde el sábado a las órdenes del cuerpo técnico que comanda el manejador Óscar Robles y ya pudo trabajar a la par de sus nuevos compañeros.
“Me sentí muy bien, es un grupo grande de peloteros y hay muchos con los que no había tenido la oportunidad de estar con ellos y me dieron la bienvenida; estamos aquí dispuestos a ayudar a lo que se necesite”, agregó.
Para el diestro la parte final del 2018 y el inicio de este nuevo año ha sido muy exitoso, ya que pudo coronarse campeón en su país y luego viajó a Panamá con la casaca de la República Dominicana.
“Fue muy emocionante; el equipo de Estrellas Orientales tenía 51 años sin haber ganado una corona y este año fui cambiado a las Estrellas y gracias a Dios pude hacer un buen trabajo, ayudar al equipo lo que necesitaba para obtener esa corona y luego jugar la Serie del caribe; las cosas salieron bien y esa misma inercia y esa misma emoción quiero traerla aquí a este equipo y dar lo mejor de mi cuando se me dé esa oportunidad a la hora de lanzar”, recordó.
El serpentinero nacido en La Romana, tenía varias invitaciones de equipos para reportar a pretemporada, incluso de Estados Unidos, sin embargo, al final decidió unirse a la “embestida tijuanense”.
“Decidimos venir aquí a Toros de Tijuana, fue la mejor opción, ya que le pregunte a Junior Lake y a varios peloteros que han jugado aquí y me dijeron que es una buena organización y que no me iba a arrepentir de la decisión de venir aquí”, concluyó.
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