ENSENADA, B.C.- Domingo 28 de octubre de 2018.- Con un comportamiento dinámico en cuanto a producción y valor, la acuacultura y la maricultura de Baja California están siendo respaldadas por la Administración estatal que encabeza el Gobernador Francisco Vega de Lamadrid, en cuya gestión se han incrementado tanto los rendimientos como el valor de los distintos productos que se cultivan y/o engordan, lo mismo en tierra que en aguas expuestas.
El titular de la Secretaría de Pesca y Acuacultura del Estado (SEPESCABC), Matías Arjona Rydalch, destacó que, en apoyo al entusiasmo de productores, y como una manera de alentar la inversión, desde la dependencia a su cargo se está promoviendo la creación del Parque Acuícola Baja California, con el que la entidad afianzaría el liderazgo alcanzado hasta el momento.
Explicó que, a través de la Dirección de Acuacultura, a cargo de Erick Peterson Chinolla, se ha estado dando seguimiento al fortalecimiento acuícola que, en 2013, sin considerar la producción de atún aleta azul, la producción generaba mil 700 toneladas de diversas especies de moluscos, peces y camarón, con un valor cercano a los 74 millones de pesos.
Ya en 2014 la producción creció a dos mil 350 toneladas, con valor de 80 millones de pesos; en 2015 las cosechas fueron de dos mil 740 toneladas, con un costo de 92.5 millones de pesos; en 2016, tres mil 120 toneladas arrojaron ingresos por 192 millones, y ya para 2017 se alcanzaron tres mil 140 toneladas, con ganancias económicas por 240 millones de pesos.
El funcionario estatal comentó que la Lobina rayada es una de las especies que ha alcanzado mayor crecimiento, especialmente a partir del 2016, año en que alcanzó las 56 toneladas, creciendo a 642 toneladas en 2017, lo que habla de una industria creciente, una de las más desarrolladas de su tipo en el mundo.
Con respecto al atún aleta azul, Arjona Rydalch informó que sólo esta especie genera un promedio de 6.2 mil toneladas en los cinco años recientes, con un valor en el mercado estimado en los 600 millones de pesos por ciclo.
Estimó que un parque acuícola podría brindar la asistencia que la industria acuícola requiere, tal como ocurre en otras partes del mundo, con la visión de responder a las necesidades de la producción ya instalada, así como para alentar nuevos proyectos.