TIJUANA.- El cartel de Luis Antonio Carreiro Galaviz, director de Inspección y Verificación, dependencia mejor conocida como “reglamentos”, se ha convertido en un nido de ratas durante la gestión de Juan Manuel Gastelum Buenrostro, alcalde de Tijuana.
Carreiro, titular de la dependencia afirma contar con la protección de Raúl Luévano Ruiz, Secretario de Gobierno, quien a su vez, es uno de los beneficiados con los negocios extraoficiales que realiza la autoridad municipal.
En esta primera entrega, señalaremos que David Loya, jefe de reglamentos en la delegación Sánchez Taboada, es uno de los consentidos del Director, debido a que semanalmente recauda miles de pesos por concepto de “cuotas”, a cambio de la operación de decenas de comerciantes ambulantes que carecen de permiso oficial.
Loya obtuvo el puesto gracias a la cercanía entre Carreiro y la esposa del primero en mención.
El jefe en la Sánchez Taboada es apoyado por Pedro Gorosica, un inspector con una reputación por los suelos. Su actuar es calificado entre los ambulantes de prepotente y grosero.
Otro cobador es Víctor Antuna, quien no forma parte de la nómina municipal, pero que recaba miles de pesos semanalmente para Loya y posteriormente para Carreiro.
Hay que remarcar que Antuna era cobrador de bares y horas extras en la administración de Jorge Astiazaran Orci, negocio que le fue retirado en este gobierno panista.
Hasta aqui este primer capitulo. A nuestros lectores, les informamos que daremos a conocer más nombres y personajes involucrados en esta mafia.