TIJUANA B.C.-Cuando a Rosario Marín, la primera inmigrante mexicana en lograr un alto puesto en la administración federal estadunidense, le preguntan cómo se llega a una posición como esa, qué valores se deben de tener y qué la empujó ahí, recuerda que la tercera parte de su vida ha aplicado una serie de valores de los cuales el primero es triunfar, pero siempre haciendo lo correcto.
En una conferencia en el teatro del Centro Cultural Tijuana (Cecut), como parte de Tijuana Innovadora 2014 “Diáspora mexicana. El talento que voló al norte”, la ex tesorera de Estados Unidos mencionó que no importa cuándo ni dónde, conducirse de la forma más correcta posible le ayudó a llegar a donde lo hizo.
“Para nosotros los políticos hacer todo bien cuando te están viendo, es sencillo; hacer lo correcto cuando nadie te está viendo, a puertas cerradas entre dos personas, cuando nadie te lo va a agradecer, cuando te apuntan y señalan, cuando no es lo más popular lo que haces, cuando tus falsos amigos te traicionan, es bien difícil”, anotó.
Pero hacer lo correcto todo el tiempo nos permitirá nunca bajar la mirada, que todo el tiempo se pueda ver de frente a la gente que uno ama, eso es muy importante. “Quiero pensar que porque siempre he hecho lo correcto y que el Senado por eso me confirmó que era digna de estampar mi firma en los billetes de Estados Unidos”, expuso.
En todo lo que hagamos, es muy importante dar lo mejor de nosotros, demostrar quiénes somos incluso en la realización de las cosas más pequeñas, para realizar bien las grandes; “yo no espero la perfección, pero sí exijo excelencia en todo lo que hagamos, pues todo lo que salga de mí, vale la pena, todo lo que yo hago lleva mi firma y por eso van a decir que eso es excelente”.
Tratar a la gente como queremos que nos traten a nosotros, es una de las premisas principales, “trata a la gente como quieres que traten a tu madre; si yo quiero que respeten mi trabajo, yo voy a respetar el trabajo de todos, porque ellos están cumpliendo su misión”.
La autora del libro “Una líder entre dos mundos” que lanzó a principios de 2007 y primera mujer latina en California en buscar el senado de Estados Unidos en 2004, destacó que siempre podremos mirar hacia adelante, no importa cuánto daño nos han hecho, “qué importa que alguien te haya hecho tanto dolor que tú no puedas salir adelante”.
Refirió que todos los retos y problemas que enfrentamos son menores que nuestra grandeza, “y te digo lo mismo, tú eres más grande, estamos en una ciudad enorme, pero juntos somos más grandes que todos los retos juntos”.
Para concluir, manifestó que cuando nos sintamos cansados y completamente desgastados, “si pueden sentir esa sagrada alegría de que todo está mejor, entonces le pueden dar gracias a Dios por hacer su voluntad aquí en la Tierra”.
- Hacer el bien cuando todos te están viendo es sencillo, hacer el bien cuando nadie te ve y a puertas cerradas, es difícil
- Hacer lo correcto nos permitirá nunca bajar la mirada
- Tratar a la gente como queremos que nos traten a nosotros, es una de las premisa principales