TIJUANA B.C.-Las ciudades de Tijuana y San Diego son una sola región con dos alcaldes que en lugar de darse la espalda trabajan brazo con brazo por su desarrollo y que comparten la misma problemática propia de una frontera común, coincidieron los alcaldes de Tijuana Jorge Astiazarán Orcí y de San Diego, California, Kevin Faulconer.
En el panel “Ciudades: Administración, intervención e identidad”, conducido por la comunicadora Lilly Téllez como parte de Tijuana Innovadora 2004 “Diáspora mexicana. El talento que voló al norte”, Astiazarán Orcí aseguró que pese a ser una de las fronteras donde existe mayor tecnología, ya no se mira a San Diego como una competencia, sino como un polo de atracción común de inversiones.
Dijo que son 180 mil trabajadores en los cuatro clusters más importantes e incluso parte de la manufactura se realiza en Tijuana y continúa en San Diego; en clúster médico, esta frontera compite con Costa Rica; el aeroespacial, con Querétaro; en el electrónico, Tijuana sigue estando a la vanguardia, y las universidades locales continúan preparando ingenieros que laboraran en esas empresas.
Sin embargo, reconoció que una de las limitantes es la falta de ferrocarril en esta frontera del lado mexicano, “sigue siendo un cuello de botella traer los productos hasta aquí por carretera”.
Tijuana tiene que aprovechar que la mano de obra china “ya no está tan barata y está demostrado que los tijuanenses tienen gran capacidad; prueba de ello es que el clúster médico tiene una subsidiaria en Suiza para la manufactura de prótesis, y pese a la puntual fama que tienen los habitantes de ese país, los errores de los tijuanenses en la manufactura fueron mínimos en comparación a ellos”.
Nuestra región, abundó, no sólo es una fuente de poder en cuestión de manufacturas, sino en capital humano, “estamos fomentando y alentando todo de lo que se trata esa riqueza y patrimonio, no es sorprendente para nosotros la capacidad que existe aquí, pero sí sorprende al resto del mundo”.
El alcalde de San Diego, California, Kevin Faulconer, destacó las relaciones con que se están desarrollando las oportunidades que existen en la región desde el punto de vista económico, “se trata no sólo de la relación entre los dos alcaldes, sino también la de nuestros jefes de departamento para ahondar sobre los temas comunes”.
Aseguró que la comunicación entre ambas comunidades nunca ha sido más sólida que ahora, “nuestra capacidad es tal que no podemos ver la frontera como un muro, sino como una oportunidad de interactuar juntos, es algo con lo que estamos comprometidos, y es parte de lo que estamos tratando en Tijuana Innovadora: destacando nuestras fortalezas”.
Sin embargo, también destacó que uno de los tópicos que se deben de considerar, son las esperas en la frontera Tijuana-San Diego; “hemos visto que baja ese flujo cuando menos se espera, la meta era poder cruzar la frontera en 30 minutos o menos, estamos comprometidos a seguir haciendo los trabajos en Otay Mesa para el cruce de camiones, pues tenemos el problema de que tardan para pasar a México”.
El munícipe sandieguino dijo que ya se está trabajando del lado estadunidense en la problemática del cruce fronterizo, “creo que hay una demanda tan creciente en el cruce fronterizo de ambos lados, que apenas estamos rascando la superficie y tenemos que llegar a ese punto”.
Kevin Faulconer aseguró que en cuanto a institucionalización, firmarán un acuerdo entre las dos ciudades para asegurar que continúe el legado de comunicación Tijuana-San Diego, que jefe de departamento y burocracia tengan un proceso formal, “será un legado que dejaremos atrás, que asegura que esta comunicación persista por décadas”.
Por otra parte, ambos alcaldes acordaron que la próxima celebración de este evento dentro de dos años, sería San Diego-Tijuana Innovadora, vistos como una sola región.
- Ya no se mira a San Diego como una competencia, sino como un polo de atracción común de inversiones
- Nuestra región no sólo es una fuente de poder en manufacturas, sino en capital humano
- Firmarán un acuerdo para asegurar que continúe por décadas el legado de comunicación entre las dos ciudades