· Reconoce titular de SEPESCABC los avances científicos de la UABC, la visión de la iniciativa privada y a coordinación del Estado y la Federación
ENSENADA, B.C.- Domingo 16 de agosto de 2015.- Una cifra récord de 124 mil crías de totoaba, producida este año por la Universidad Autónoma de Baja California (UABC), será distribuida en partes iguales para la engorda comercial y el repoblamiento del pez en el Golfo de California, en un proyecto que desde el inicio de la presente administración, ha sido respaldado por el Gobernador Francisco Vega de Lamadrid.
Matías Arjona Rydalch, titular de la Secretaría de Pesca y Acuacultura (SEPESCABC), manifestó su beneplácito luego del segundo embarque de alevines a La Paz, Baja California Sur, a donde hace unos días fueron enviados 64 mil ejemplares para su engorda en corrales de la empresa Ocean Earth Farms, bajo el amparo de una Unidad de Manejo Ambiental (UMA).
El funcionario estatal destacó que la carne del pez, aún en veda para su aprovechamiento con cualquier arte de pesca, ya puede ser consumido en restaurantes mexicanos, especialmente del centro del país, pero aclaró que aún no está permitida su exportación.
Comentó que el Gobierno del Estado, a través de la SEPESCABC, no sólo ha invertido recursos en el desarrollo científico para la reproducción de la especie, sino que trabaja de manera permanente en la gestión ante la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT), para facilitar los trámites de transporte y comercialización de juveniles y del producto final.
Con respecto a la liberación de ejemplares en el Mar de Cortés, indicó que esta se realizará en dos fases, durante agosto y septiembre, a razón de 30 mil crías en cada evento.
Por otro lado, explicó que ante la Subsecretaría de Gestión para la Protección Ambiental de la SEMARNAT, a cargo de Rafael Pacciano Alemán, la SEPESCABC está gestionando el otorgamiento de UMA´s para establecer zonas de precría o granjas piloto en el Golfo.
En estas unidades, se pretende que la mitad de los ejemplares en engorda se liberen en el medio natural, y la otra parte se destine a la comercialización, con lo que se promovería el desarrollo económico y social de las comunidades.